La restricción temporal de viajes no esenciales a Estados Unidos se mantiene, así lo confirma el gobierno estadounidense, al permitir el acceso terrestre sólo a los ciudadanos estadounidenses y residentes permanentes.
Además, pueden ingresar personas por motivos médicos, trabajo esencial, viajes diplomáticos, entre otros motivos y datos disponibles en sus sitios oficiales.
Por lo pronto, las visitas turísticas permanecen sin ser posibles.