A poco más de un mes de haber entrado en vigor la aplicación de multas por utilizar bolsas de plástico, establecido en el Reglamento de Protección al Ambiente, el Ayuntamiento de Tijuana continúa concientizando tanto a la ciudadanía, como a los comerciantes y proveedores a no entregar, obsequiar o vender este tipo de artículos desechables en la ciudad.
La Dirección de Protección al Ambiente (DPA) aseguró que se llevan visitados más de 25 establecimientos, entre ellos, tiendas de autoservicio, restaurantes y cafés, para explicar a los comerciantes sobre las disposiciones y normas que se deben acatar para evitar el uso de bolsas plásticas, sean biodegradables o no.
Para la dependencia es importante la fase de la información y el trabajo de concientización a cada comercio, supermercado y tienda de autoservicio sobre la prohibición del uso de estos artículos, con el propósito de adaptación de los clientes y que éstos no lo vean como imposición, sino como un beneficio para hacer una ciudad más sustentable y evitar problemas de salud, pero también es importante fomentar sustitutos, como el uso de bolsas de tela, mochilas, incluso hechas de ropa reciclada.
La dependencia municipal explica que aún existen dudas entre los propietarios y empleados de los negocios para fomentar la cultura entre sus consumidores y proveedores, por ello, se les deja un aviso y se ha obtenido buena respuesta. Las autoridades se muestran positivas para que se respeten las normas establecidas en los artículos 110 y 216, que hablan sobre el incumplimiento y prohibición del uso de este plástico en los comercios.
Según un estudio realizado por el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), en el mundo se consumen 5 billones de bolsas plásticas al año. En México se generan diariamente 102 mil 895 toneladas de residuos, de los que el 10.9 por ciento son plásticos. En Tijuana se recolectan mil 900 toneladas de basura diarias; dicho material representa entre 60 y 70 por ciento de residuos sólidos que llegan a ríos y océanos.
Es importante sensibilizar y promover la cultura del cuidado del medio ambiente en los establecimientos y clientes para que se cumpla con el reglamento. Aquellos que hagan caso omiso podrían ser sancionados con una multa de entre 10 a 300 Unidades de Medidas y Actualización (UMAS), equivalentes a 880 pesos y hasta los 26 mil 400 pesos.