La semana pasada, un río de cemento atravesó una caverna que forma parte del acuífero subterráneo del sistema Garra de Jaguar en Quintana Roo.
Los videos ublicados por Raúl Padilla, buzo y activista, y compartidos por la agrupación Selvame del Tren, muestran este río de cemento atravesando el interior de la caverna.
“Donde alguna vez hubo selva y sus habitantes, ahora hay devastación, muerte, y máquinas y dinamita que lo aniquilan. Donde alguna vez corrió agua dulce pura y cristalina por los ríos subterráneos más extensos del planeta, ahora corren derrames de concreto y se erosionan cientos de columnas de hierro, contaminándolo todo con óxido y cemento”, explica la asociación.
Hasta el momento no se han contabilizado las afectaciones provocadas por el material de construcción en el sistema Garra de Jaguar, por donde pasa el Tren Maya, que para muchos activistas es “el peor ecocidio en México y de la humanidad”.